Nadie con dos dedos de frente puede negar que los datos de las últimas Encuestas de Población Activa (EPA), así como del paro registrado tanto a nivel nacional como de nuestra comunidad autónoma, son francamente buenos, por cuanto significa que un buen número de personas han encontrado un puesto de trabajo.
Que casi es tanto como decirles a esos miles de afortunados que les ha tocado la lotería. Dicho y reconocido lo anterior, no es menos cierto que, que a día de hoy, hay 100.000 personas activas menos que había en el cuarto trimestre de 2013.
Seguramente ello es debido a la cantidad de personas, sobre todo jóvenes, que se han ido de nuestro país con la intención de encontrar un puesto de trabajo fuera de nuestras fronteras.
Un dato importantísimo para conocer nuestra realidad socio-laboral, y el mantenimiento de nuestras prestaciones sociales, es saber qué número de personas están ocupadas en España en cada momento, porque a nadie se le escapa que cuantos más trabajadores desempeñen su función, más garantía existirá para aquellos que cumplan con el requisito de la edad para poder jubilarse con total y absoluta garantía. Pues bien, resulta que en el cuarto trimestre de 2011, existían en España 18.153.000 personas ocupadas, y a día de hoy hay 17.353.000, nada más y nada menos que 800.000 menos que hace dieciocho meses.
Por otra parte, y sin dejar de valorar positivamente la creación de puestos de trabajo en los últimos meses de este año, todos estaremos de acuerdo en que los mismos son precarios, ya que más del 90% son contratos temporales, y a tiempo parcial. Tanto es así que, tal y como publica algún medio de comunicación, y con base en los datos de la EPA del segundo trimestre de este año, 837.000 personas han trabajado una hora a la semana, fundamentalmente en el sector servicios o contrataciones para una actividad concreta, y nada más y nada menos que 1.275.000 personas trabajaron nueve horas semanales, lo que equivale en este último caso a trabajar poco más de un día, de una jornada laboral de ocho horas.
Por supuesto que todas esas personas han desaparecido de las listas del paro, y pasan a formar parte de esas 17.353.000 personas ocupadas en este segundo trimestre del año 2014.
Si a todo lo expuesto anteriormente, le añadimos la inmensa cantidad de contratos temporales (90%), contratos de días, o un mes, así como los salarios que se abonan a esos trabajadores, que en muchos casos son realmente de la más absoluta de las miserias, qué futuro les espera a nuestra jóvenes para ser independientes y constituir una familia, y ya no digamos de los mayores, ya que con las cotizaciones por semejantes contrataciones, cómo se podrá garantizar que algún día cobrarán una pensión digna.
Podemos hacerlo mejor, con total seguridad.
Publicado en La Opinión a Coruña
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